La campaña publicitaria de los helados Moyo buscaba aumentar el reconocimiento de marca y las ventas durante el verano, cuando la demanda de helados es mayor. Se realizó un análisis del público objetivo, identificando que la mayoría eran jóvenes y familias que frecuentan las plazas comerciales.
La campaña se programó para mostrarse en horarios pico, como los fines de semana. Los anuncios se lanzaron con contenido dinámico que cambiaba cada hora para mantener el interés. Durante la campaña, se llevó a cabo un seguimiento del tráfico en las tiendas Moyo y se recogieron comentarios en redes sociales para evaluar la efectividad.
Al finalizar la campaña, se observó un aumento significativo en las ventas y un incremento en el reconocimiento de marca, además de una mayor interacción en redes sociales. Se realizaron informes detallados sobre el rendimiento de la campaña, destacando lo que funcionó bien y áreas de oportunidad para futuras iniciativas.